Autor | M. Martínez Euklidiadas
La aerotermia es uno de los métodos más eficientes de climatizar edificios enteros usando poca energía debido a su altísimo rendimiento. No es de extrañar que las administraciones lo instalen cada vez más en sus locales y traten de exportarlo a sectores residenciales e incluso a barrios completos. Así funciona la aerotermia en las ciudades.
¿Qué es la aerotermia?
La aerotermia es la energía que una bomba de calor extrae del aire ambiente, así como la tecnología y la maquinaria que puede lograr este hito tecnológico. La aerotermia es una de las formas de climatizar más eficientes que existen. Tanto, que fue considerada como fuente de energía renovable por la Directiva Europea 2009/28/CE.
¿Cómo funciona la aerotermia?
En esencia, el mecanismo de la aerotermia consiste en una ‘cinta transportadora’ de calor mediante un gas refrigerante: del exterior al interior en invierno (modo calor) y en el sentido inverso en verano (modo frío). Los siguientes circuitos simplificados muestran ambos modos.
Aunque con una bajada de eficiencia, funciona en climas muy fríos y muy cálidos gracias a que la válvula de expansión y el compresor ayudan a aumentar o disminuir de forma artificial la temperatura y presión del refrigerante.
Edificios geotérmicos extremadamente eficientes
Los aparatos de aerotermia, que son eficientes incluso en configuraciones 1×1 (una unidad exterior, otra interior) para uso doméstico y privado, aumentan aún más su eficiencia y disminuyen más su impacto cuando se instalan en edificios completos, debido a que sus recursos se usan mejor.
Desde hace décadas la aerotermia es usada en edificios enteros, ubicando las máquinas en sótanos o azoteas y distribuyendo el calor y el frío mediante conductos (en caso de aerotermia aire-aire) o mediante canalizaciones (aerotermia aire-agua, más eficiente si cabe). ¿Cuál es el siguiente paso?
Aerotermia en el ámbito del barrio
La climatización por barrios no es un sistema precisamente novedoso. El district heating para baños públicos data de los siglos IV y II a.e.c., aunque el primer caso de calefacción urbana tal y como se entiende aquí se usó por primera vez en 1332, cuando el pueblo de Valois en Chaudes-Aigües (Francia) diseñó una red de calor por leña para decenas de viviendas.
En la actualidad, la ciudad de Nueva York usa un sistema de vapor urbano para calentar, en Moscú se usa desde hace décadas por barrios y en Madrid se usa en la Ciudad Universitaria. El problema del district heating es que usa combustibles fósiles o biomasa, con sus respectivas emisiones de CO₂. ¿Se puede hacer mediante aerotermia? Lo cierto es que sí.
En China se ha presentado hace poco el District Cooling System, un sistema de refrigeración para edificios públicos, de negocios y zonas públicas del distrito de Qianhai, en la ciudad de Shenzhen. Se trata de un sistema de aerotermia pero a escala superior a la industrial, extremadamente eficiente no solo desde la vertiente energética durante el funcionamiento.
Una de las ventajas de los sistemas de aerotermia comunitarios frente a los privativos o individuales es que evitan residuos tecnológicos y electrónicos, porque hace un uso más racional de la materia con la que se construyen los aparatos. Cada centro de enfriamiento sustituye a cientos, si no miles de aparatos de aire acondicionado.
La climatización por barrios mediante aerotermia, que incluirá edificios públicos y de oficinas, puede usarse en paralelo junto a un urbanismo mixto: residir sobre una oficina implica llegar a casa y que ya haya algo de calor remanente.
Imágenes | Bays work, M. Martínez Euklidiadas, Sigmund