Autora | Lucía Burbano
¿Pueden materiales como el caucho, utilizados en equipamientos públicos como los parques infantiles, tener efectos nocivos sobre la salud? Generalmente, los diversos controles de calidad a los que se someten harían pensar que no. Muchos de estos sintéticos que provienen del petróleo contienen, sin embargo, sustancias dañinas para el medio ambiente y, tal vez, para el ser humano.
Cuando hablamos de la población infantil, más vulnerable a la contaminación y a la exposición de sustancias tóxicas presentes en el aire, es fundamental tener toda la información al respecto.
¿Contamina el caucho?
El caucho es un polímero elástico de origen natural o sintético. El primero se obtiene de las exudaciones de ciertas plantas tropicales mientras que el segundo es un derivado del petróleo y del gas natural.
Por su elasticidad, resistencia y dureza, el caucho es el componente principal de los neumáticos que se utilizan en vehículos de motor, aviones y bicicletas. El impacto ambiental de ambos tipos de caucho es notable.
En el caso del caucho natural, el problema radica en que su cultivo y producción provoca grandes talas de bosques para crear plantaciones, que habitualmente son monocultivos y degradan el hábitat y el suelo. El árbol del que se obtiene el caucho es el Hevea brasiliensis, nativo del Amazonas, pero que también se cultiva en países del sudeste asiático con el mismo clima tropical.
La producción de caucho sintético, por su parte, tiene un importante impacto medioambiental debido al uso de productos petroquímicos. Algunas estimaciones afirman que la producción de una tonelada de caucho sintético puede generar más de 2,5 toneladas de emisiones equivalentes de CO2.
Usar caucho en los parques infantiles, pros y contras
El caucho se empezó a utilizar en patios y zonas de juego infantiles a principios del siglo XXI como sustituto de las superficies de cemento, grava, césped artificial o arena, materiales que pueden provocar rasguños o riesgo de lesiones. Se escogió este material porque presenta algunas ventajas:
Es un material inclusivo
Las superficies de caucho presentan un acabado liso que facilita el acceso a todos los usuarios, incluso a aquellos que utilizan silla de ruedas.
No se deforma
El caucho no deja marcas aunque se utilicen bicicletas o coches de juguete, por lo que no se deforman con facilidad y mantienen su superficie uniforme. Esto facilita el desplazamiento sin que se formen bultos u ondulaciones que puedan provocar tropiezos y caídas.
Amortigua caídas
Al tratarse de un suelo acolchado, amortigua posibles caídas.
Es más higiénico
Además es resistente a las inclemencias del tiempo y se desinfecta fácilmente. A los microbios no les gusta el caucho.
Contribuye a la economía circular
El caucho que se utiliza en los parques infantiles proviene de neumáticos que ya no pueden usarse en vehículos, contribuyendo a su reciclaje.
Sus detractores, en cambio, argumentan los siguientes motivos para no utilizar el caucho en zonas recreativas:
Puede contener restos tóxicos de neumático
Al estar fabricado con neumáticos reciclados, existe la posibilidad de que contenga trazas de metales pesados u otras toxinas. Según Emissions Analytics, hasta unos 400 compuestos químicos diferentes, entre los que se encuentran hidrocarburos poliaromáticos, benzotiazoles, isopreno y metales pesados como zinc y plomo.
Daña el suelo
Otro inconveniente del caucho empleado en patios y parques infantiles es su impacto en la salud del suelo, ya que no se descompone y no aporta nutrientes. Esto significa que, con el tiempo, empeora la fertilidad y la estructura del suelo.
Entonces, ¿caucho sí o no?
Dos son los tipos de caucho sintético que se utiliza en instalaciones infantiles:
- SBR, que se fabrica a partir del reciclaje y reutilización de los gránulos de caucho de neumáticos reciclados de los camiones.
- EPDM o Etileno Propileno Dieno, tipo M, un material que se fabrica con materia prima nueva.
Sobre sus posibles efectos tóxicos, varios papers, como éste, explican que, aunque el 19% de las sustancias químicas presentes en el caucho sintético están clasificadas como carcinógenas por las agencias gubernamentales de EE.UU., sólo una larga y continuada exposición a las mismas supondría graves riesgos para la salud.
¿Supone por tanto un riesgo? Dada la relativa novedad de este tipo de pavimento en muchas ciudades, aún no contamos con la información adecuada. La exposición a sus partículas nocivas puede estar limitada por el simple hecho de que el uso de los parques infantiles no es continuado, aunque dado lo que sabemos, su potencial contaminante para la flora y la fauna de estos espacios públicos debería ser objeto de mayor estudio.